Perito Moreno se convierte nuevamente en el epicentro de la minería santacruceña con la realización de la Expo Patagonia Minera, el evento más destacado del sector en la provincia. Esta nueva edición congrega a operadoras, trabajadores, proveedores, autoridades y vecinos de toda Santa Cruz, en un marco de profundas discusiones sobre el modelo minero vigente y su verdadero impacto en el desarrollo local.

Amadeo Gravino, presidente de CAPROMISA, adelantó que la Cámara llevará un mensaje firme y renovador este año: es necesario repensar la minería actual y reavivar el vínculo con las comunidades locales. “El modelo minero que tenemos hoy en Santa Cruz está agotado —advirtió Gravino— y no puede existir desarrollo sostenible sin la comunidad. Por eso, nuestra consigna principal es clara: crear valor en el territorio es la única inversión que verdaderamente atrae inversión.”

A pesar de los avances en producción, Gravino señala que la minería de Santa Cruz atraviesa señales claras de un esquema que ya no genera valor tangible en las propias regiones donde se desarrolla. La Expo, además de aproximar la minería a la sociedad, revela esta realidad en cifras y testimonios: cientos de jóvenes santacruceños recorren los stands con currículum en mano, buscando una oportunidad laboral en su tierra natal; proveedores locales hacen largas filas para acceder a una cadena de valor que no logra integrarlos plenamente; y las comunidades que conviven con la actividad extractiva no perciben su impacto reflejado en un desarrollo real y sostenible.

“No estamos hablando de minería sí o no —remarcó Gravino—, porque Santa Cruz ya definió su camino. La verdadera discusión es cómo debemos llevar adelante la minería para que la actividad obtenga lo que necesita, pero también deje lo necesario para que el territorio crezca.”

Desde CAPROMISA, se advierte que la conflictividad sindical, el bajo empleo local y la escasa participación de proveedores santacruceños no son problemas aislados, sino síntomas inevitables de un modelo agotado. “Cuando la minería no está integrada al territorio, pierde legitimidad. Y una vez que esa legitimidad se pierde, las inversiones no se atraen, sino que se ahuyentan”, subrayaron.

Para la Cámara, la prioridad del sector debe orientarse hacia la reconstrucción de la confianza en la provincia. “La inversión más importante que puede hacer hoy la minería no es financiera, sino social y productiva: invertir en Santa Cruz, generar empleo genuino para los santacruceños, implementar de manera estructural políticas de Compre Local, promover la formación continua y garantizar la participación efectiva de proveedores y comunidades en la cadena de valor”, explicó Amadeo Gravino.

En esta línea, CAPROMISA enfatiza que el verdadero círculo virtuoso se da cuando la minería invierte en las comunidades y estas, a su vez, invierten en la minería. “Esa es la única inversión que realmente atrae más inversión”, aseguró Gravino con convicción.

El dirigente destacó además que este cambio no puede recaer solo en una operadora ni una cámara, sino que requiere un compromiso colectivo entre todos los actores del sector. “El Gobierno Provincial tiene hoy una oportunidad histórica para liderar la construcción de un nuevo modelo minero para Santa Cruz, con un Estado que fije políticas claras, operadoras que asuman compromisos medibles, proveedores que inviertan en calidad, trabajadores que fortalezcan su capacitación y comunidades que participen activamente del desarrollo”, puntualizó.

Para CAPROMISA, crear valor local no debe interpretarse como un gasto, sino como una inversión estratégica fundamental que asegura la continuidad de la minería, la estabilidad social y el crecimiento provincial.

Este nuevo pacto que propone CAPROMISA promete beneficios concretos para todos los sectores: para las operadoras, al reducir la conflictividad y brindar previsibilidad; para los trabajadores, consolidando empleo en la región; para los proveedores, al fortalecer la economía regional; para las comunidades, al traducir la actividad en desarrollo palpable; y para la provincia, al consolidar el arraigo y la soberanía sobre su territorio.

“Santa Cruz no está discutiendo si quiere minería o no. Está debatiendo cómo hacer minería para que esta impulse el verdadero desarrollo. Este es el momento para rediseñar y sostener un modelo que permita que la actividad minera perdure en el tiempo”, concluyó Amadeo Gravino, reafirmando el compromiso de CAPROMISA con un futuro más inclusivo y próspero para la minería santacruceña.